Un líder multiplicador es un concepto en la gestión y el liderazgo que se centra en el potencial de un líder para "multiplicar" la inteligencia y las capacidades de las personas a su alrededor. Este concepto fue popularizado por Liz Wiseman en su libro "Multipliers: How the Best Leaders Make Everyone Smarter". Según Wiseman, hay dos tipos de líderes: Multiplicadores y Disminuidores.
Los líderes multiplicadores se caracterizan por:
1. Extraer y amplificar la inteligencia colectiva: Fomentan un ambiente donde los miembros del equipo pueden desarrollar y contribuir con sus mejores ideas.
2. Empoderar a otros: Delegan responsabilidades y autoridad, dando a los empleados la oportunidad de asumir retos y desarrollar sus habilidades.
3. Fomentar un ambiente de aprendizaje y experimentación: Estimulan la innovación y aceptan los errores como parte del proceso de aprendizaje.
4. Desafiar a otros: Plantean desafíos que motivan y empujan a los empleados a superar sus límites y lograr más de lo que creían posible.
5. Generar y fomentar debate constructivo: Promueven un intercambio abierto de ideas, valoran diferentes puntos de vista y toman decisiones basadas en un pensamiento crítico y colaborativo.
Por otro lado, los líderes disminuidores tienden a opacar la inteligencia y las capacidades de sus equipos, a menudo debido a un exceso de control, falta de confianza en los demás y una tendencia a destacar su propio genio.
El impacto de un líder multiplicador es significativo, ya que no solo mejora el desempeño del equipo, sino que también contribuye al desarrollo profesional y personal de sus miembros, creando un ambiente laboral más positivo y productivo.
