El Modelo de Tecnología de Woodward es una teoría en el campo de la administración y organización empresarial desarrollada por la socióloga británica Joan Woodward en la década de 1960. Este modelo se enfoca en la relación entre la tecnología utilizada por una empresa y su estructura organizativa. Woodward clasificó las tecnologías de producción en tres categorías principales:
Producción unitaria o de taller: Esta categoría incluye procesos de producción que son personalizados y hechos a medida. Ejemplos típicos incluyen la fabricación de productos únicos o la producción en pequeñas series. Las empresas que utilizan este tipo de tecnología tienden a tener una estructura organizativa flexible y menos formalizada, debido a la necesidad de adaptarse a diferentes requisitos de los clientes.
Producción en masa o en serie: Este tipo de tecnología se utiliza para la producción de grandes cantidades de productos estandarizados. Ejemplos incluyen la fabricación de automóviles y electrodomésticos. Las organizaciones con producción en masa suelen tener una estructura organizativa más rígida y jerárquica, con un alto grado de formalización y procedimientos estandarizados para garantizar la eficiencia y la consistencia en la producción.
Producción de proceso continuo: Este tipo de tecnología implica la producción de productos a través de un proceso continuo y automatizado. Ejemplos incluyen la refinación de petróleo y la producción de productos químicos. Las organizaciones que utilizan tecnología de proceso continuo tienden a tener estructuras organizativas altamente formalizadas y mecanizadas, con un enfoque en la eficiencia y el control de calidad.
Joan Woodward concluyó que no existe una estructura organizativa única que sea la más efectiva para todas las empresas. En cambio, la estructura más adecuada depende del tipo de tecnología de producción que utiliza la empresa. Esta teoría sugiere que la alineación entre tecnología y estructura organizativa es crucial para el desempeño efectivo de la empresa.